En los últimos años se ha producido una innegable explosión de investigaciones y artículos de divulgación sobre los padres tóxicos. Todos sabemos que las personas tóxicas pueden dejar secuelas devastadoras en sus propios hijos.

Además, también sabemos que la disfunción emocional puede tener efectos a largo plazo en el bienestar emocional del niño.

Pero, ¿qué ocurre con los abuelos tóxicos y su papel en el sistema familiar? ¿Cómo influyen los abuelos controladores o egoístas en la educación de un niño? Y ¿cuándo hay que plantearse poner límites o cortar lazos? Entremos en materia.

Índice:

    Por qué los abuelos tóxicos pueden ser tan problemáticos

    Vivimos en un mundo que esencialmente codicia la relación entre abuelos y nietos. Piénselo: muchas veces, percibimos a los abuelos como personas desinteresadas e incondicionalmente cariñosas, que miman a sus nietos con todo lo que siempre han querido.

    También solemos percibirlos como relativamente benignos. Aunque sus acciones parezcan un poco "extravagantes", la mayoría de nosotros nos apresuramos a defender cualquier comportamiento debido a que son mayores.

    Estos conceptos erróneos, por supuesto, pueden hacer aún más insidioso el abuelazgo tóxico. Los abuelos tóxicos pueden ser manipuladores, abusivos, controladores y egoístas. Desgraciadamente, puede que no tengan en cuenta su interés ni el de su hijo. Asimismo, cuando los abuelos interfieren en la crianza, su relación con su hijo puede tener consecuencias perjudiciales.

    Según Claire Karakey, LPC, "es importante tener en cuenta que incluso los abuelos bienintencionados pueden ser tóxicos. Muchos de ellos crecieron en la generación de posguerra, en la que había mucho miedo y hambruna; pasaron por muchos traumas.

    Vivieron en una época en la que no era aceptable sentir o mostrar emociones. También les educaron diciéndoles que no se quejaran... que estuvieran agradecidos porque otros lo tienen peor que tú.

    Por eso, cuando los abuelos vienen y critican todo lo que haces hoy como padre, es más que probable que sea porque ellos vivieron de otra manera y no porque intenten desaprobarte o avergonzarte intencionadamente."

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    Sin embargo, Karakey añade: "Esto no deja de ser emocionalmente invalidante, porque todos anhelamos la aprobación de nuestros padres. Nos hiere en lo más hondo, y cuando esta crítica es continua y persistente, puede ser extremadamente tóxica, provocando ansiedad y sentimientos de inadecuación".

    15 señales de abuelos tóxicos

    Aunque puedas pensar que el comportamiento tóxico es obvio de notar, no siempre es así. Por ejemplo, si has tenido una relación complicada con tus padres o suegros, puede que ni siquiera te des cuenta de todo el alcance de sus problemas. Aquí tienes algunas señales clave a tener en cuenta cuando se trata del comportamiento inapropiado de los abuelos.

    #nº 1 No respetan sus normas

    Dejaste claro que no querías que tu hijo viera la tele y que la hora de acostarse era a las 19.00 en punto. Llegas a casa pasada la medianoche de la noche de la cita (en la que tu padre se ofreció amablemente a hacer de canguro), y tu hijo está tirado delante del televisor.

    ¿Qué ha pasado? Lo que ha pasado es que los abuelos tóxicos tienden a socavar las intenciones de los padres. Suelen pensar que saben lo que es mejor, aunque les hayas dejado claro que quieres que sigan unas normas concretas.

    A veces, el incumplimiento de tus normas es flagrante. Otras veces, pueden ser más sigilosos y mentir al respecto, con la esperanza de que no te des cuenta de su comportamiento. En cualquier caso, la confianza es un componente esencial de cualquier relación sana. Si no sientes que puedes confiar en la persona que cuida de tu hijo, ¿es ése el tipo de cuidador que quieres en tu vida?

    #2 Te hacen sentir culpable para que pases tiempo con tus hijos

    A la mayoría de los miembros de la familia les gusta pasar tiempo con los niños pequeños, pero si los abuelos te ruegan, exigen o te hacen sentir culpable por no pasar tiempo juntos, es una señal de alarma.

    Los abuelos tóxicos suelen creer que merecen pasar todo el tiempo que quieran con sus nietos. Pero, por desgracia, por mucho que den, suele parecer que no es suficiente.

    Eso es porque a menudo compararán meticulosamente el tiempo ellos Y si creen que se quedan cortos, ¡no dude de que se lo harán saber!

    #3 Miman a sus hijos de forma excesiva e inapropiada

    Todo el mundo conoce el clásico cliché del abuelo malcriado, pero si el maltrato parece más calculado y mezquino, es hora de prestar atención.

    Los abuelos tóxicos pueden mimar a sus nietos:

    • Intentar superarte a ti o a otros miembros de la familia durante los cumpleaños o las fiestas.
    • Comprar grandes regalos y dárselos a sus hijos sin su aprobación (como un ordenador portátil, billetes de avión internacionales o un cachorro).
    • Hacer regalos después de haber pedido expresamente que no se hagan más.
    • Mimar a tus hijos de forma que faltes al respeto a tu paternidad (dándoles caramelos cuando normalmente no les permites comer azúcar o dejándoles llevar cierta ropa que no consideras apropiada).

    Sugerencia de lectura: La lista saludable de límites para los abuelos: 21 cosas que NUNCA deben hacer

    #4 Parece que sólo les gustan los bebés o los niños muy pequeños

    A los abuelos narcisistas les suelen gustar los niños monos (pero indefensos). Esta preferencia les permite tener el poder y el control que buscan. Además, no tienen que preocuparse de que su hijo les replique.

    Si los abuelos parecen inclinarse hacia los niños más pequeños, presta atención: probablemente sólo quieren todo el amor y la atención que conllevan la infancia y la niñez.

    Pero si parecen distantes o enfadados con los mayores, significa que realmente no quieren las responsabilidades de tener una relación más madura.

    #5 Tienen un hijo de oro

    ¿Ponen los abuelos a uno de los niños en un pedestal importante? ¿Prefieren obviamente a ese niño por encima de todos los demás?

    Los narcisistas y otras personas disfuncionales tienden a dividir a las personas en "buenas" o "malas". El niño de oro, a sus ojos, es perfecto. Por lo tanto, alabarán y celebrarán a ese niño incesantemente y, a menudo, a expensas de otras personas.

    Desgraciadamente, el síndrome del niño de oro puede ser increíblemente efímero. Este niño se enfrenta a una inmensa presión para triunfar. Sabe, a un nivel básico, que la gente define su valía en función de sus éxitos externos.

    Cualquier error suele parecer catastrófico, ya que les preocupa "perder" el amor y el apoyo que codician.

    #6 Alternan premios y castigos con sus hijos

    Algunos abuelos utilizan a sus nietos para satisfacer sus propias necesidades. Amelia Alvin, psiquiatra, afirma que "los abuelos son generosos al practicar la teoría de la recompensa o el castigo cuando se trata de los nietos.

    Si te portas bien, te comerás una tableta de chocolate. ¿Quieres una galleta? Ve a buscar mis gafas al piso de arriba. Manipulan a los niños en situaciones y cosas para conseguir su propósito".

    Pueden intensificar estas tácticas de manipulación para provocar aún más ansiedad. Alvin destaca este ejemplo: "Si no me visitas, no te daré tu regalo". Parece muy inofensivo que un abuelo ofrezca una recompensa a cambio de una tarea.

    Pero, por desgracia, enseñan el hábito de recibir afirmaciones externas para conseguir que ellos mismos o su trabajo sean validados más adelante en la vida."

    Sugerencia de lectura: La dinámica de la familia tóxica narcisista explicada

    #7 Te recuerdan con frecuencia su brillante paternidad

    Saliste bien y no nos preocupamos por X, Y o Z.

    Todos los padres de tu amigo hicieron ___. ¡Lo sabíamos!

    No tuve ni la mitad de apoyo que tú, y me gusta pensar que hice un trabajo increíble.

    La crianza de los hijos es un trabajo duro y la mayoría de los padres son capaces de admitir sus errores. Pero si tus padres creen que han hecho un trabajo impecable, es muy probable que intenten presumir de su pericia cada vez que puedan.

    A veces, la fanfarronería es más encubierta. Por ejemplo, pueden menospreciar la forma en que otros padres disciplinaron o educaron a sus hijos para mostrar su comportamiento de forma más positiva. O pueden intentar hacerse las víctimas comentando que lo hicieron lo mejor que pudieron a pesar de su falta de dinero, recursos o apoyo.

    En cualquier caso, el mensaje es claro: hicieron un trabajo fantástico criándote, así que ¿por qué no vas a creer que harán un trabajo fantástico con tu hijo?

    Y aunque estés de acuerdo en que tus padres hicieron un gran trabajo, eso no significa que deban restregártelo por la cara. Tampoco significa que estén totalmente libres de culpa por cómo se comportan. Al fin y al cabo, las personas sanas saben que no pueden hacerlo todo bien.

    #8 Hablan mal de otros abuelos o de la familia extensa

    Los abuelos tóxicos quieren demostrar que son los mejores cuidadores en la vida de tu hijo. En consecuencia, a menudo reducirán a toda la familia para intentar demostrar su fantástica valía.

    Por supuesto, si te enfrentas a ellos en este comportamiento, pueden reaccionar por:

    • Negar rotundamente el comportamiento.
    • Insistir en que estás exagerando porque "sólo estaban bromeando".
    • Exagerar el comportamiento de otro miembro de la familia para que parezca peor de lo que realmente es.
    • Ponerse a la defensiva e insistir en que sólo intentan mostrarte la verdad.

    Hablar mal de otras personas es una cosa. Pero una vez que estos abuelos empiezan a hablar así delante de los niños, es hora de prestarles atención. Como sabe, los niños absorben las acciones y las palabras que oyen. Así que estos mensajes pueden desencadenar sin duda sus miedos, confusión y frustración.

    #9 No asumen personalmente la responsabilidad de sus errores

    Los accidentes ocurren. Por ejemplo, su hijo puede caerse en el parque y hacerse un feo corte en la frente. Usted puede asumir que no es culpa de nadie, pero un abuelo tóxico no lo hará. ever admitir que tal vez colocaron a su hijo pequeño en un equipo de juego demasiado grande para él.

    O, si te enfrentas a ellos por cruzar un límite, no se disculparán por su comportamiento, sino que pueden volverse hostiles o agresivos.

    Algunos abuelos engañan a sus hijos adultos haciéndoles creer que... ellos En casos extremos, pueden recurrir a desprestigiarte ante los demás, intentando que parezcas el malo.

    #10 Están Completamente Obsesionados Con Sus Hijos ( Unhealthy Attachement tio Grandchildren)

    Seguro que la mayoría de los abuelos se sienten prendados de sus nietos, pero un abuelo o abuela obsesionado con un nieto puede significar problemas más profundos.

    Por ejemplo, puede significar que no tienen ninguna afición aparte de pasar tiempo con tus hijos. No tienen ninguna vida más allá de lo que hacen con tus hijos.

    También significa que utilizan a sus hijos como única fuente de felicidad.

    En el momento en que se sienten amenazados en la relación, suelen atacar o hacer aspavientos para llamar la atención.

    Además, a este tipo de abuelos les molestará que sus hijos crezcan. No sabrán cómo enfrentarse a ser "menos necesarios" o "menos importantes".

    Sugerencia de lectura: 7 estrategias para

    #11 Tienen expectativas demasiado altas para sus hijos

    ¿Esperan los abuelos que tus hijos saquen sobresalientes? ¿Les echan la bronca cuando pierden el balón o tropiezan al hacer deporte? ¿Se meten con su aspecto o hacen comentarios malintencionados sobre sus amigos?

    Insultar a un niño nunca está bien. La mayoría de la gente lo sabe. Pero tener expectativas demasiado poco realistas para un niño también puede causar problemas. Estas expectativas suelen crear una base de vergüenza.

    Pueden hacer que los niños se vuelvan perfeccionistas y controladores. En los casos más graves, también pueden contribuir al consumo de sustancias, los trastornos alimentarios y las autolesiones.

    #12 Sólo se comprometen con lo que quieren

    ¿Necesitas una canguro para el fin de semana? Estarán encantados de ayudarte. ¿Quieres que te ayuden con los platos o la colada mientras cuidas de tu recién nacido? Se pondrán en contacto contigo.

    Los abuelos tóxicos suelen estar presentes cuando las cosas son divertidas y les interesan. Por ejemplo, puede que no pestañeen cada vez que les pides que vigilen a los niños.

    Pero si necesitas otras fuentes de apoyo práctico, pueden mostrarse desdeñosas o no estar disponibles de repente.

    Por supuesto, es razonable que cada uno tenga sus límites. Nadie está intrínsecamente obligado a ayudarte, pero si insisten en que puedes acudir a ellos para cualquier cosa -y luego se muestran poco fiables o incoherentes- es motivo de preocupación.

    #13 Comienzan los dramas

    A las personas tóxicas les encanta sembrar el caos a su alrededor. Parece que disfrutan poniendo nerviosa y nerviosa a la gente, porque así mantienen su propia sensación de poder.

    Un abuelo tóxico puede intentar "sembrar ideas" en la mente de tu hijo haciéndole preguntas capciosas sobre quién es su padre favorito o preguntándole por qué sus otros abuelos nunca vienen a visitarle.

    Pueden hacer comentarios sarcásticos sobre ciertas creencias o intereses, todo porque quieren cuestionar la forma de pensar de su hijo.

    La gente sana fomenta la autonomía. La gente tóxica quiere que la gente piense como ellos. Si desafías ese statu quo, volverán el drama contra ti.

    #14 Se ponen histéricos cuando pones límites

    ¡No entiendo por qué lo pones en una guardería cuando nos tienes a nosotros! Es demasiado joven, de todos modos.

    ¿Cómo que no puede venir este fin de semana? ¡Hace una semana que no la veo!

    No entiendo por qué eres tan grosero cuando te he sido de tanta ayuda.

    Los abuelos tóxicos quieren relaciones a su manera. La dinámica suele seguir el siguiente patrón: si ellos deciden poner límites, todo el mundo debería respetarlos automáticamente. Pero, cuando es al revés, suelen actuar confusos, devastados o incluso beligerantes.

    Las personas sanas también pueden tener problemas con los límites, pero comprenden su utilidad. Las personas tóxicas se ofenden cuando otros ponen límites, los perciben como un ataque personal.

    A veces, los narcisistas vulnerables no replican cuando les pones límites, sino que utilizan otras tácticas manipuladoras, como quejarse de lo poco que les queda de vida o de que sienten que nadie les quiere. No te equivoques: estos comentarios están pensados para hacerte sentir culpable.

    #15 Maltratan físicamente a sus hijos

    Nunca, bajo ninguna circunstancia, está permitido que un adulto haga daño a un niño. Por desgracia, quizá usted (o sus padres) crecieron en una generación en la que los azotes, los golpes, los empujones u otras formas de castigo físico eran normales.

    Los abuelos tóxicos pueden defender su comportamiento. Pueden insistir en que es "bueno para ellos" o que "tienen que respetar las normas de la casa" o que "no queremos que se ablanden". Estas excusas carecen de sentido. Las continuas investigaciones indican que el castigo corporal no tiene absolutamente ningún beneficio positivo.

    Como padre, si sospecha que se está produciendo un abuso de este tipo, es esencial que separe a sus hijos de estos abuelos inmediatamente.

    Cómo tratar a los abuelos tóxicos

    Si has reconocido pautas de abuso emocional, es normal que te sientas abrumado, triste o enfadado. Al fin y al cabo, ¡la mayoría de nosotros queremos esa relación idílica con nuestros hijos y sus abuelos! Sin embargo, puede ser frustrante darse cuenta de que las cosas son más destructivas de lo que parecen. Entonces, ¿cómo decirles a los abuelos que se aparten?

    Hable con su cónyuge

    ¿Qué opina su cónyuge (o el otro progenitor del niño) de la situación actual? ¿Han notado ellos también las mismas señales de alarma?

    Ten en cuenta que a veces tenemos puntos ciegos cuando se trata de nuestros propios padres. Puede que seamos más indulgentes o compasivos con ellos de lo que seríamos con nuestros suegros.

    Puede ser útil iniciar la conversación compartiendo sus observaciones recientes. Por ejemplo, ¿le compró su suegra a su hijo un gatito por Navidad sin consultar a nadie? ¿Dejó su padre que su hijo comiera comida basura todo el fin de semana en lugar de la comida que usted preparó con antelación?

    Establecer límites claros

    ¿Qué necesita que cambie? ¿Se trata de un comportamiento concreto o de todo un cambio de personalidad? Si no sabe por dónde empezar, escriba sus expectativas. Tener una lista tangible puede ayudarle a mantenerse en el buen camino.

    Según John P. Carnesecchi, LCSW, "Debe rectificar y controlar el comportamiento. Evalúe el nivel de comportamiento de los abuelos y cree un plan para determinar qué es lo que cree que está provocando toxicidad en la dinámica familiar. Ante todo, nunca se debe socavar la decisión de un padre, especialmente delante de los niños. Usted es el padre, y los abuelos tienen que entender su papel ycomprender su papel".

    Los límites son un componente esencial de cualquier relación sana. Sin ellos, las cosas a menudo se sienten caóticas y ambiguas. Los límites pueden referirse a límites físicos, emocionales, financieros y digitales. Estos son algunos límites que tal vez quieras establecer con los abuelos tóxicos:

    • Nada de maldecir delante de mis hijos.
    • Nada de dar de comer a mis hijos ____.
    • La hora de acostarse es en ____.
    • No le compre a mi hijo ____.
    • No hables de ___ delante de mis hijos.
    • No lleve a mi hijo a ____.
    • En los eventos familiares, esperamos que ____.

    Recuerda que los límites deben ser explícitos. No los suavices ni te andes con rodeos. Debes ser lo más específico posible, así podrás controlar logísticamente si los siguen o no.

    Carnesecchi afirma: "Como padre, no tienes que justificarte, defenderte, validarte, ni siquiera explicarte. Limítate a exponer el resultado que has elegido y sigue adelante".

    Estos rasgos específicos no tienen reglas específicas de límites. La clave aquí es ser firme, definir tus límites, explicar los valores y expectativas de tu familia y esperar que tus límites sean respetados. Tú tienes el control".

    Considere sus respuestas

    Es posible que los abuelos tóxicos no reconozcan la magnitud de su comportamiento hasta que se enfrentan a él. En algunos casos, pueden ser receptivos a tus comentarios e integrarlos inmediatamente.

    Según Mikela Hallmark, LPC y LMHC, "si un abuelo es alguien con quien puedes hablar, expresa empatía y está dispuesto a trabajar en el cambio, es una gran señal."

    Pero, en la mayoría de los casos, las personas tóxicas no responden bien a la retroalimentación, sino que suelen responder de la siguiente manera:

    • Insistiendo en que estás exagerando.
    • Intentando convencerte de que tú eres el mal padre/la mala persona.
    • Poner excusas por su comportamiento (intentando solicitar tu compasión).
    • Mentir descaradamente sobre cualquier cosa con la que te hayas enfrentado a ellos.
    • Hacer débiles comentarios sobre cómo van a cambiar (sin tomar ninguna iniciativa).
    • Insistiendo en que "nunca" pueden hacer nada bien en tu opinión.

    Cualquiera de esas reacciones son manipuladoras y están diseñadas para hacerte dudar o sentirte culpable por tus límites.

    Establecer consecuencias claras

    Que los abuelos falten al respeto a los padres no es algo que haya que tolerar. Además, que los abuelos sobrepasen los límites (sin recibir ninguna consecuencia) no hace más que propiciar comportamientos problemáticos.

    A la hora de establecer límites, hay que ser firme y concreto en lo que se espera de uno. Luego, hay que pensar en cómo se quiere hacer entender la situación. Por ejemplo, puede ser tan sencillo como echar a tus padres de casa si se quejan de tu forma de criar a los niños, o "suspenderlos" durante una semana si incumplen una norma concreta.

    En cualquier caso, puede que tengas que disciplinar a tus padres como lo harías con tus hijos. Primero, hazles saber cuáles son sus límites y qué ocurre si se pasan de la raya. Después, asegúrate de que seguir adelante. La coherencia es la única forma real de transmitir su mensaje.

    Evite hablar mal de los abuelos delante de sus hijos

    Puede ser tentador desahogarse con sus hijos, sobre todo después de que un abuelo haga algo especialmente ofensivo, pero resista esta tentación.

    Hablar mal de los abuelos puede crear mensajes contradictorios en los niños, sobre todo en los más pequeños, que parecen idolatrar a sus abuelos. Pero también puede afectar a los niños mayores, que pueden tener relaciones sólidas e independientes con sus padres o suegros.

    A medida que usted vaya superando nuevos límites, es posible que sus hijos perciban nuevos cambios. Si le hacen preguntas, es importante que evite criticar o avergonzar a sus abuelos. Dependiendo de la edad de su hijo, es posible que pueda compartir algunas de sus preocupaciones (tratando de ser objetivo).

    Considerar otras formas de cuidado de niños

    Muchos abuelos cuidan de sus hijos, ya sea de forma ocasional o regular, pero si te preocupa su comportamiento tóxico, quizá debas reevaluar esta dinámica.

    Cuanto más tiempo pasen tus hijos con abuelos tóxicos, más probable será que esa toxicidad repercuta en su desarrollo. Aunque puedas pensar que los niños muy pequeños están exentos, las investigaciones demuestran que cualquier forma de maltrato puede desencadenar un sinfín de problemas de salud física y emocional.

    Cortar el contacto (si es necesario)

    Puedes apartar a las personas tóxicas de tu vida, y darte ese permiso es crucial.

    Cortar todo contacto por completo es obviamente la respuesta más extrema para hacer frente a un comportamiento tóxico. Pero si las cosas empeoran progresivamente, puede ser tu única opción. Esta decisión requiere inherentemente un nivel de compromiso. Debes estar dispuesto a bloquear, eliminar y evitar todo rastro de las personas que eliminas.

    Si no estás preparado para tomar esa decisión, puedes considerar un enfoque de bajo contacto. Con este método, reduces tu comunicación y tiendes a mantener sólo conversaciones superficiales. El bajo contacto también requiere mantener unos límites fuertes para ti mismo.

    Reflexiones finales

    Como padre, tu trabajo es proteger a tus hijos y asegurar su bienestar lo mejor que puedas. Pero, por supuesto, establecer estos límites no siempre es fácil. Navegar por los patrones familiares es sin duda complejo, y cambiar de relación o incluso cortar con los abuelos tóxicos puede ser todo un reto.

    Pero cuando los abuelos interfieren en la crianza, afecta a todo el sistema familiar, repercute en el desarrollo del niño y puede desencadenar su propia ira, resentimiento y miedo.

    Puede que la sangre sea más espesa que el agua, pero el amor que sientes por tus hijos es más espeso que cualquier sangre. Tenlo en cuenta a la hora de plantearte cómo gestionar la presencia de los abuelos en sus vidas.